lunes, 3 de septiembre de 2007

La Leyenda de Mercedes

Mercedes nos cuenta su viaje a Berlin, la historia del Kaiser Guillermo que le regala una reproduccion de esta escultura ( la Leyenda de Amor y Psique . ) a su amada Carlota. Sobre la pasion de los amantes que nuestra amiga descubre en el regalo, ella nos podrà contar y lo publicarè. Por ahora veamos la escultura de Canovas.

Le agrego unos versos de Agustini que tal vez armonicen con la historia

OTRA ESTIRPE

Eros, yo quiero guiarte...Padre ciego,
pido a tus manos todopoderosas
¡su cuerpo excelso derramado en fuego
sobre mi cuerpo desmayado en rosas!

La eléctrica corola que hoy despliego
brinda el nectario de un jardín de Esposas;
para sus buitres en mi carne entrego
todo un enjambre de palomas rosas.

Da a las dos sierpes de su abrazo, crueles
...mi gran tallo febril... Absintio, mieles
viérteme de sus venas, de su boca...¡

Así tendida, soy un surco ardiente
donde puede nutrirse la simiente

de otra estirpe sublimemente loca!

Delmira Agustini

3 comentarios:

Anónimo dijo...

La poesía es arrebatadora!!!!!!!!

Delimira Agustíni tiene una poesía vibrante de erotismo, en el estilo de Rubén Darío, que arrasó con las poetas y damas y lechos cuando vino a Buenos Aires..... e hizo escuela....... Gran, gran poeta argentina, que adhirió a la corriente del romanticismo empíreo (creo que se llamaba así) que proponía Darío.......
ayayayay! mirá que Darío también la hizo llorar a nuestra Delmirita.... y ella terminó escribiendo eso de los surcos abiertos.....¡lo parío! ¡menudo metejón que se había pescado........ese romance estremeció las letras y a la pacatería argentinas....las crónicas de la época dieron cuenta -veladamente- de tales ardores........ y sabés cual fue el fin de la Delmirita? La mató su marido (el legítimo) a quien ella lo consideraba un “bruto”

Ahí te mando algo mas de la Delmirita….. a disfrutar!!!!!!!!!!!!!



CON TU RETRATO

Yo no sé si mis ojos o mis manos
encendieron la vida en tu retrato;
nubes humanas, rayos sobrehumanos,
todo tu Yo de Emperador innato

amanece a mis ojos, en mis manos.
¡Por eso, toda en llamas, yo desato
cabellos y alma para tu retrato,
y me abro en flor!... Entonces, soberanos

de la sombra y la luz, tus ojos graves
dicen grandezas que yo sé y tú sabes...
y te dejo morir... Queda en mis manos

una gran mancha lívida y sombría...
¡Y renaces en mi melancolía
formado de astros fríos y lejanos!




CUENTAS DE FUEGO

Cerrar la puerta cómplice con rumor de caricia,
deshojar hacia el mal el lirio de una veste...
-La seda es un pecado, el desnudo es celeste;
y es un cuerpo mullido, un diván de delicia.-

Abrir brazos...así todo ser es alado;
o una cálida lira dulcemente rendida
de canto y de silencio...más tarde, en el helado
más allá de un espejo, como un lago inclinado
ver la olímpica bestia que elabora la vida...
Amor rojo, amor mío;
sangre de mundos y rumor de cielos...
¡Tú me los des, Dios mío!



MERCEDES

dañe dijo...

Querida Mercedes, Delmira nació en Montevideo, el 24 de octubre de 1886.Por lo tanto es uruguaya.

Lindo blog

ef

jorge gómez dijo...

Efectivamente , Delmira era uruguaya. Igual que idea vilariño, gabriela acher, El Fusilado, eduardo galeano, lucho avilès (jaj...Hagansè cargo).
Fìjensè una nota luego de la muerte de Agustini, a manos de su ex-marido , con el que ella mantenìa encuentros clandestinos:

.
"Ha sido un drama horrible y extraño. El trágico fin de los otrora esposos Reyes- Agustini, ( ambos de 27 años)abre una intrigación que tal vez no se cerrará nunca. Los dos se amaban, como lo atestigua un largo idilio, durante el cual Delmira Agustini, poetisa excelsa vertió lo mejor de su amor en sus poesía consagradoras, y él, Reyes, depuso su espíritu de enamorado a los pies de su dueña. Era la pareja ideal. Nada faltó en su dicha. Amor, gloria, dinero: todo lo tenía. Luego vino el eclipse: ella por un lado, él por otro. ¿Es qué los novios no sabían ser esposos?. Apesar del divorcio el amor sobrevivió, más fuerte que antes. El idilio cambió de forma: los dos se amaron en la clandestinidad y el misterio. Allí, en la alcoba donde nadie más que ella era reina vivieron ese nuevo amor incomprensilbe y se incubó la tragedia. Los pobres muertos, jóvenes y dichosos, se han llevado consigo la explicación de ese desenlace enigmático, oscuro, novelesco."

Que misterioso todo, no?